John Buchan (1875- 1940) toma prestada cierta atmósfera a Edgard Alan Poe y construye su propia casa Usher, esta vez como un templo construído para una deidad un tanto enloquecedora al que se le debe ofrecer siempre el mismo sacrificio. Nightingale -un erudito detrás de un inhallable libro- llega a conocer al señor Dubellay, quien no sólo tiene en su poder el deseado libro, sino que también construyó el templo detrás de su casa. Nightingale primero se sentirá atraído por la particularidad del dueño del libro pero a medida que la locura de Dubellay deje de ser pintoresca para convertirse en peligrosa querrá escapar de la situación.
A diferencia de The 39 steps (1915), la trama de The wind in the portico: Henry Nightingale's story carece de dinamismo. A pesar de su reducidas páginas, resulta redundante y tiene demasiada conciencia del parecido con Poe como para emanciparse de su influencia. Buchan busca el sostén en Poe pero no logra construir la atmósfera de misterio sobrenatural que se propone. Tal vez las excesivas descripciones del templo y de las figuras que se encuentran en él resulten lo contrario de lo que se propuso: que es perturbar al juzgar el pasaje final con un hálito sobrenatural pero que no perturba.
The wind in the portico: Henry Nightingale's story es parte de un volumen con 28 cuentos llamado The Runagates Club. Una vez terminado este cuento largo, releer a Poe para ver las diferencias.
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