Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de junio, 2024

Vudú Urbano (Edgardo Cozarinsky, 1985)

  Los primeros relatos de Edgardo Cozarinsky (1939-2024) unidos por la temática del exilio, el ida y vuelta a la patria abandonada (o más bien tendríamos que decir Ciudad de Buenos Aires) y una crítica no tan velada hacia los motivos del exilio (la persecución de la triple AAA) que se extiende a la figura de Perón y Evita que a veces nombra y otras veces no. Pero más allá de cuestionamientos a su mirada política, los relatos no dejan de parecer desahogos personales que están pensados más como diario íntimo que como producción literaria para terceros. Es así como el relato que abre el volumen funciona hasta el momento que aparece el amigo del servicio militar que también era soplón de los militares. La unidad del relato se rompe para dejar paso a una elipsis que Cozarinsky hace pasar por un borroso recuerdo que deja a medio camino el cuento. El resto del volumen sigue en esa lìnea y es una constante repetición de temas que se van acumulando con muy poco entusiasmo tanto de las

Seis problemas para Don Isidro Parodi (Jorge Luis Borges-Adolfo Bioy Casares, 1942)

Seis relatos donde se juega con tanto con la parodia como los códigos de la novela deductiva y cuyo resultado es por lo menos irregular. El problema básico es que tanto Bioy Casares como Borges pretenden emular a Wilkie Colllins o Chesterton pero carecen de lo que en esos autores era un mèrito: el respeto por los personajes. Para los dos autores todos los personajes que integran los relatos (incluído el mismo Isidro Parodi) son patéticos, víctimas de sus propias torpezas (que no de sus ambiciones u perversiones) o engreídos y merecedores de las situaciones que les comentan a Isidro Parodi para que resuelva desde su celda, encerrado por un crimen que no cometió. En pocas palabras, Jorge Luis Borges (1899-1986) y Adolfo Bioy Casares (1914-1999) se colocan por encima de sus personajes y se divierten moviendo los hilos de sus destinos sin importarles sus motivaciones o intereses. Si el primer relato del volumen ( Las doce figuras del mundo ) sirve como carta de presentación y eso capta el

Para quien quiera, pueda o desee aportar